sábado, 9 de octubre de 2010

2012


Director: Roland Emmerich.
Actores: John Cusack, Amanda Peet, Oliver Platt, Thandie Newton, Danny Glover, Woody Harrelson y Morgan Lily.
Año: 2009.
País: Estados Unidos.

Argumento: El calendario maya predice el fin del mundo para el 2012. Y tal como se predice, en el 2012 empiezan a producirse toda clase de catástrofes (terremotos, erupciones volcánicas, inundaciones, megatsunamis...) que podrían provocar la extinción del ser humano.

Comentario: Esta película es un torrente de efectos especiales. Simplemente eso. Que nadie espere nada más. Así pues, simplemente hay que dejarse llevar y disfrutar de unos efectos especiales apabullantes (la destrucción de Los Ángeles deja sin aliento). Eso sí, la película no tiene nada más. El guión es inexistente, tendente a la exageración y plagado de clichés. Es lo malo de Roland Emmerich, que suele dar una de cal y otra de arena. Pero al menos, esta película se puede disfrutar. Podemos ver a la típica familia que acaba unida mientras sobrevive a la catástrofe. Un típico estereotipo del cine de catástrofes. Pero Emmerich va más allá y lo exagera todo. El padre de familia, que interpreta John Cusack, parece un superhéroe indestructible (sobrevive a todo: a la destrucción de la ciudad, que atraviesa con una limusina; a la caída de rocas ardiendo, conduciendo una autocaravana que incluso cae por un agujero; a un aterrizaje de emergencia en el Himalaya, saltando del avión en un coche). Aún con todo, si uno está atento, puede ver ciertas señales: El Obama envejecido (Danny Glover interpreta al presidente de los Estados Unidos que, aunque no se llama Obama, está inspirado en él; aunque se cae en el tópico de presidente bondadoso, que se queda con los ciudadanos a pesar de que eso suponga su muerte), la destrucción de la Capilla Sixtina (que comienza con unas grietas en el fresco de La Creación de Adán, separando el dedo de Dios del de su creación), la caída de un portaaviones (llamado Kennedy) sobre la Casa Blanca (¿alusión a cómo la política belicista está destruyendo la Casa Blanca?), Schwarzenegger (en un cameo seguramente no autorizado como gobernador de California) diciendo que no hay de qué preocuparse segundos antes de que se desencadene la tragedia, los chinos como salvadores del mundo (cuentan que en los cines chinos, la gente aplaudía en la proyección de esta película), La India convertida en superpotencia científica o el hecho de que, al final, el único continente que se salva de la destrucción es África.
Como curiosidad, diré que el calendario maya en realidad no predice nada. Sólo es un calendario. Lo que sucede es que los mayas creían que la vida en la Tierra se componía de ciclos de 52 años mayas, que terminaban en grandes catástrofes que borraban la vida sobre el planeta para dar paso a una nueva era. Lo curioso radica en que su calendario (que, por cierto, es el más preciso, incluso más que el nuestro) termina el 21 de diciembre de 2012, lo que indica que el fin de la era actual será en esa fecha (y lo que sí es cierto es que se están detectando cambios en el sol y en los campos magnéticos de la Tierra, así como en su velocidad de rotación). Otra teoría dice que, en realidad, en esa fecha no acontecerá ninguna catástrofe, pero sí habrá un cambio de mentalidad en todo el mundo.
En definitiva, 2012 es un auténtico espectáculo, disfrutable si se deja la mente en blanco. Los efectos especiales son lo mejor.

Escena favorita: Sin duda, me quedo con la destrucción de la ciudad y su hundimiento. Quitando la huida en coche, el resto es lo más realista que se puede ver en el cine de catástrofes actual. Toda una ciudad entera hundiéndose con un realismo inusitado.

Calificación: 8/10.

2 comentarios:

Marcos dijo...

Kurtz, no había visto la película pero ahora ya no resisto más. Mañana mismo la veo y te cuento. Magnífica crítica.
Saludos.

Kurtz dijo...

Espero que te guste y ya me contarás.
Saludos.