La niebla

Director: Frank Darabont.
Actores: Thomas Jane, Marcia Gay Harden, Laurie Holden, Toby Jones y Jeffrey deMunn.
Año: 2007.
País: Estados Unidos.

Argumento: Un pequeño pueblo es azotado por una intensa tormenta. Cuando ésta pasa, algunos de los habitantes van a un supermercado en busca de provisiones. Allí son aislados por una extraña y densa niebla en la que parece que se oculta algo más.

Comentarios: Frank Darabont vuelve a adaptar a Stephen King y vuelve a salirle la jugada redonda. Después de Cadena perpetua (adaptación del relato Rita Hayworth y la redención de Shawshank) y La milla verde (adaptación de la novela El pasillo de la muerte), con bastante buenos resultados, Darabont tomaba como base el relato La niebla y construía una gran película de terror. Darabont, sin duda, ha sido de los pocos directores que mejor han sabido traducir a imágenes las letras de King. El ambiente es muy tenebroso (recomiendo ver la versión en blanco y negro, que fue la que inicialmente había ideado el director) y mantiene la tensión durante todo el metraje. Aparentemente es una película de serie B con toques de Lovecraft, pero el relato avanza con paso firme hacia la ciencia ficción y el terror más dignos.
Hay actuaciones especialmente destacables, en especial la de Marcia Gay Harden, interpretando a una fanática religiosa de las que dan ganas de matar. Thomas Jane también realiza una buena interpretación, alejado de los papeles a los que suele acostumbrarnos.
En el aspecto técnico, también es una película muy destacable, con unos efectos especiales a la altura y una banda sonora, sobre todo en su parte final, simplemente espectacular.

Escena favorita: Dos escenas son muy destacables en la recta final de la película. Si no has visto la película deja de leer, porque te voy a spoilear.
La aparición del gigantesco monstruo cruzando la carretera mientras los protagonistas lo contemplan asombrados desde su coche es uno de los mejores momentos de la película.
El otro es su final, cuando Thomas Jane mata a sus acompañantes, incluido su hijo, para que no sufran devorados por los monstruos. Pero ya no quedan balas para matarse él. Desesperado sale del coche para dejarse matar por los monstruos, solo para comprobar que la niebla se va disipando y que el ejército está tomando el control de la situación, matando a los monstruos. Él cae abatido, consciente del error que ha cometido. ¿Cómo vivirá a partir de entonces este personaje? Eso es algo que debemos imaginar. Un final terrible que va más allá del relato original de Stephen King. Y con una de las músicas más impactantes y perturbadoras que he oído nunca: The host of seraphim.

Calificación: 10/10.